lunes, 22 de marzo de 2010

DAVID LAGO GONZÁLEZ - La mala gestión de una dictadura

.

Martin Wittfooth - Obsession, oil on canvas

(Martin Wittfooth - Obsession, oil on canvas)

.

Está visto que dentro de la cualidad de MONSTRUO hay diferentes matices. Quizás sólo para sus hijos o sus padres, ninguno es bueno. Pero hay algunos con más carisma que otros, y el carisma, independientemente de todas las monstruosidades del Monstruo, conlleva a un hechizo, un encantamiento, una empatía (sobre todo, cuanto más lejos se está de sus actos y consecuencias): una identificación, y finalmente la mitificación.

Es evidente que la actual situación cubana no habría sucedido igual —o no habría sucedido en lo absoluto— si Fidel Castro hubiera estado en activo, pero la decrepitud lo llevó a cierta condición de pre-momia a la que los visitantes oficiales deben besar su mano antes de partir hacia sus lugares de origen. Todavía no hay mausoleo, todavía la pre-momia tiene sus “ocurrencias”, que el importante extranjero de turno debe reír para después pasar a la foto final.

Pero todo el asqueroso refinamiento de la maldad que posee Fidel se convierte en una mueca burda, insolente, cínica y repulsiva en la cara, los gestos y la engolada voz de tiple de su hermano Raúl que, nunca mejor dicho, es harina de otro costal. Todo es tan repelentemente evidente en este sujeto, que, no sólo es que la gente está ya cada vez más cansada, no es que las “delictivas” huelgas de hambre se propaguen, no es que las madres de los presos salgan a la calle en defensa de sus hijos (recuerdo que, curiosamente, cuando la dictadura batistiana, también lo hicieron), no es que por doquier les salgan defensores impresentables como Guillermo “Willy” Toledo y Miguel Luchino González Bosé, no es que hasta los adictos a todas las revoluciones del mundo (menos a la de ETA porque saben que no les conviene para su imagen) sumen sus firmas (vamos a ver cuán pasajeramente puede ser) al maratón de adhesiones a favor de la liberación de los presos políticos cubanos, no, es que la mala gestión por parte de Raúl Castro de la dictadura comunista cubana está pasando de la sutileza a la bestialidad, y cada vez es más física y brutal, como lo son las dictaduras de derecha.

© 2010 David Lago González

1 comentario:

David Lago González dijo...

ACUSO recibo del seudónimo "josemaleante" dejando link de una cosa descalificadora escrita y publicada en La Habana (no tan) Elegante. Que cada cual se contente con lo que tiene en casa.