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domingo, 24 de abril de 2011

LEYENDO EN WOOSTER (domingo 24 de abril de 2011)

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Contra censores y energúmenos

Vargas Llosa clama por "la libertad y los libros" en Buenos Aires.
Ambiente caldeado en las horas previas a la conferencia que un grupo de intelectuales quiso vetar

SOLEDAD GALLEGO-DÍAZ | Buenos Aires 22/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/cultura/censores/energumenos/elpepucul/20110422elpepucul_1/Tes

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Mario Vargas Llosa no inauguró finalmente la 37ª Edición de la Feria del Libro de Buenos Aires, como estuvo previsto en su momento, pero sí pronunció el discurso "principal" del orador invitado, 24 horas después de la apertura formal de la muestra. "Se supone que la inauguración es un acto único, pero aquí se ha desdoblado en dos días distintos, imagino que para evitar que yo apareciera junto a los políticos el día de la apertura", ha explicado a EL PAÍS el premio Nobel de Literatura 2010. "Mi discurso no cambiará por eso: defender el derecho de los libros a ser libres es defender nuestra libertad de ciudadanos, el precioso fuego que la atiza, mantiene y renueva", afirmó.

La Feria del Libro de Buenos Aires sortea la polémica sobre Vargas Llosa. El ambiente, que parecía más calmado, se caldeó mucho en las últimas horas, con unas imprevistas declaraciones de Aníbal Fernández, jefe de Gabinete de la presidenta. Pareció ignorar las instrucciones de Cristina Kirchner de dejar en paz al escritor y lanzó un furioso ataque tanto contra Vargas Llosa como contra Fernando Savater, que visita también estos días Buenos Aires y que se rio de los intelectuales argentinos que protestan por la presencia del premio Nobel en la Feria del Libro.

El acto de inauguración formal, que se desarrolló el miércoles por la tarde, tampoco ayudó a calmar las cosas. Aunque no asistieron ni la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, ni el intendente de la ciudad, Mauricio Macri, sus enviados y representantes se las arreglaron para alimentar el clima de confrontación. El ministro de Educación, Alberto Sileone, en especial, convirtió la inauguración en un mitin político puro y duro. Logró el extraño prodigio de inaugurar una Feria del Libro en una capital latinoamericana sin mencionar el hecho de que este año un escritor latinoamericano ha sido reconocido con el Nobel.

Vargas Llosa no se sintió ofendido por el cambio de programa, ni alteró por eso el contenido de su discurso, una defensa apasionada del libro que "como árboles de un bosque encantado, se animan al abrirlos". "Basta que celebremos con sus páginas esa operación mágica que es la lectura para que la vida estalle en ellos".

El escritor no rehuyó, sin embargo, la polémica. "Agradezco a la presidenta su oportuna intervención para atajar el intento de veto de algunos colegas y adversarios de mis ideas políticas para desinvitarme al acto", aseguró. "Ojalá esa toma de posición se contagie a todos sus partidarios y sea mantenida por ella misma en su conducta gubernamental".

Enorme expectación

Vargas Llosa quiso que su discurso, esperado con enorme expectación en una sala abarrotada de público, fuera seguido por un diálogo con el periodista y escritor argentino Jorge Fernández Díaz, y que discurrió con toda tranquilidad, en medio de risas, anécdotas y relatos extraordinarios del Premio Nobel.

Vargas Llosa se mostró relajado y disfrutó del coloquio, en el que se tocaron temas literarios, biográficos y también políticos. Reafirmó, en un momento del diálogo, que seguirá criticando todo lo que no le guste tanto de América Latina como de Argentina. "Hay que seguir ejerciendo la libertad con prudencia y sin beligerancia", dijo. Tal afirmación fue recibida con una cerrada ovación del auditorio.

Previamente, el premio Nobel de Literatura tuvo que soportar que un pequeño grupo de piqueteros "ideológicos" cortara el tráfico frente a su hotel y que, con un ensordecedor ruido de bombos, reclamara su marcha del país. "Les vi desde la ventana. No eran muchos, pero hacían mucho ruido. Gritaban contra mí, pero no estaban muy informados porque me decían que Humala va a ganar las presidenciales en Perú, sin saber que yo ya he anunciado que voy a votar por él, para evitar que regrese Fujimori al poder y se legitime su etapa de robo, asesinatos y corrupción".

Vargas Llosa reconoce que este tipo de polémicas le resulta muy cansada y aburrida y que han conseguido estropearle un viaje a Buenos Aires, algo que para él siempre había sido muy agradable y enriquecedor y que ahora le exige, incluso, llevar protección en la calle. "Estoy deseando que elijan un nuevo premio Nobel para que sea el siguiente el que tenga que soportar toda esta presión", reconoce. Pero no está dispuesto a permitir que nadie le impida hablar libremente, y mucho menos en una Feria del Libro. "Eso sería admitir la derrota frente a los energúmenos", protesta. "Sobrellevo todo esto con espíritu deportivo, pero la verdad es que no comprendo por qué la inauguración de una Feria del Libro tan hermosa como la de Buenos Aires no puede ser algo sencillo sino que se convierte en un combate político y en un intento de censura".

Contra ellos, los censores y energúmenos, ha dirigido su discurso "semiinaugural": "El episodio, más allá de lo anecdótico, es un asunto actual: la libertad y los libros", explica. "Manuscritos, impresos o ahora digitales, representan la diversidad (mientras no sea expurgados, claro está). Esta extraordinaria diversidad desaparece cuando gracias a los libros nos sumergimos en lo profundo hasta llegar a aquellas raíces de la especie, pues allí descubrimos lo que hay de solidario y de semejante, una condición, unos anhelos, alegrías y miedos, que establecen una identidad recóndita sobre las diferencias y distancias".

Los libros, cree, ayudan a derrotar los prejuicios y a descubrir que somos iguales en el fondo, que los "otros" somos "nosotros". El premio Nobel ha explicado cómo la Inquisición española prohibió durante casi tres siglos que se imprimieran novelas en América Latina. "Una de las perversas y felices consecuencias de esa prohibición", afirmó, "fue que la ficción prohibida se las arregló para contaminarlo todo. Eso ha sido muy beneficioso en los dominios del arte y la literatura, pero bastante catastrófico en otros en los que, sin una buena dosis de pragmatismo y de realismo, un país puede irse a pique". "Los comisarios políticos han reemplazado en la vida moderna a los inquisidores de antaño", denunció.

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NOTA DEL BLOGGER: Pues de censores y comisarios políticos del arte y la literatura, todos energúmenos, sabemos bastante los cubanos, así como los rusos y todos los súbditos de los países que han sido comunistas. Lo triste es que esos sub-personajes siguen campeando a diestra y siniestra, y con la anuencia de la mayor parte del colectivo del ghetto (o exilio, o diáspora) cubana y la cuña de la mayor parte de la oligarquía literaria internacional. Pasaron de ser deplorables a respetables. (DLG)

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Bardem, Bollaín y Casas, premiados en Nueva York

La Asociación de Cronistas reconoce a actores y cineastas en su gala anual

AGENCIAS - Nueva York - 24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/gente/tv/Bardem/Bollain/Casas/premiados/Nueva/York/elpepugen/20110424elpepuage_1/Tes

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NOTA DEL BLOGGER: EE UU es uno de los pocos países del mundo que llega al colmo de premiar incluso a aquellos que le desprecian, como es el caso de tantos actores y directores de cine de mejor y peor valía que se han pasado la vida criticando el encasillamiento de Hollywood para con los actores hispanos (que por lo general siempre terminan haciendo papeles, no de españoles, sino de sudacas) mientras ellos no dan eso que llaman “el salto a Hollywood”. ¿Inocencia, ingenuidad, bondad, respeto a la profesionalidad del otro? Valores muy poco profesados en suelo patrio. (DLG)

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Procesiones ateas

CLARA SÁNCHEZ 24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/madrid/Procesiones/ateas/elpepiespmad/20110424elpmad_9/Tes

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La Semana Santa se repite con bastante precisión año tras año incluso en tiempos tan sorprendentes como los nuestros. Comienza con sol el Domingo de Ramos para seguir con tormenta y nubarrones el Viernes Santo. Un calco del libro de historia sagrada de mi infancia en que en una lámina Jesús entraba triunfante en Jerusalén montado en burro y en otra había tres solitarias cruces en el Calvario bajo un cielo tenebroso. Una escena era alegre y multitudinaria y la otra de una soledad aplastante. Espinas, dolor, sangre y temblor de tierra. La siguiente lámina representaba la ascensión del hijo de Dios a los cielos.

Sí que me molesta que los católicos sean tan susceptibles

La historia es de una gran sencillez mitad realista, mitad mágica; mitad humana, mitad divina: al mundo de los seres humanos llega otro ser superior, más elevado, para mostrarnos un camino espiritual. Siente compasión por nosotros porque somos unos descerebrados crueles que, en sus propias palabras, no sabemos lo que hacemos, y la verdad es que algunos milenios después continuamos igual o peor. Pero para comprendernos de verdad este ser con poderes extraordinarios ha de ser uno de los nuestros y sentir nuestras pasiones, deseos y limitaciones. Ha de vivir en un momento histórico y social concreto, por lo que nace, crece y muere, aunque como sabemos que es un ser especial el que ascienda a los cielos no lo consideramos un giro completamente gratuito en la narración, porque desde el mismo momento de su atípico nacimiento su existencia va acompañada de unas cuantas pinceladas sobrenaturales sabiamente repartidas hasta el final apoteósico con el advenimiento del Espíritu Santo, representado en la lámina con una paloma.

¿Inverosímil? ¿Increíble? El creyente no se cuestiona estos detalles. Y para el no creyente puede ser el más bello relato de ciencia ficción de la historia. Su encanto reside en la frescura y el candor con los que transmite todo tipo de sensaciones y sentimientos: amor, odio, traición, culpa, remordimientos, compasión, dolor, alegría, y unas cuantas imágenes de una eficacia demoledora, como "la última cena", que aún está en explotación comercial, como la "sábana santa", la corona de espinas, la copa, la cruz. ¿Qué no daría cualquier líder político por tener a un asesor al que se le ocurriesen frases del tipo: "Dejad que los niños se acerquen a mí", "los últimos serán los primeros", "poned la otra mejilla", "todo está consumado"?

A veces la gente muy religiosa, que todo lo basa en la fe, no llega a saborear la gran libertad creativa de esta narración. Yo no me considero religiosa en ese sentido. No me he empapado de religiosidad entre otras cosas porque fui de las pocas niñas de mi generación que no asistió a un colegio de monjas y que solo me acercaba por la iglesia en bautizos, bodas y comuniones, lo que en el fondo me hacía sentirme fuera del sistema en un país en que en Semana Santa solo se escuchaban las cadenas de los penitentes.

Las procesiones a la fuerza tampoco me gustaban, me entristecían. En cambio ahora empiezo a entenderlas. Me gusta ver la emoción de la gente, el clima que se crea en torno a una sensación, el colorido, el barroquismo. La gente se disfraza, llora y canta. El ambiente es contagioso y hay que ser muy frío para no dejarse llevar por todo ese delirio. Y lo mismo ocurre en las procesiones del interior, mucho más austeras y sobrias, como las de nuestro Madrid. Las procesiones y la Semana Santa, sobre todo en Andalucía, hoy por hoy son una atracción cultural y turística de enorme envergadura, que genera mucho dinero y que se ha convertido en marca, en postal. Del mismo modo que la fiesta del Orgullo está llena de heteros, las procesiones de Semana Santa están llenas de ateos. Lo que importa es la fiesta y el calor humano, la energía colectiva, como en los conciertos y en el fútbol.

A mi vida no le afectan negativamente estas fiestas, salvo que los hoteles estén abarrotados y no encuentre habitación. Pero sí que me molesta que los católicos sean tan susceptibles. Y si lo son que se aguanten. En este país siempre ha habido católicos radicales y ateos radicales. Y si los ateos quieren hacer una marcha, que la hagan, están en su derecho. Y si hay sátira que la haya. ¡Ya está bien!

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NOTA DEL BLOGGER: De acuerdo en todo con Clara Sánchez, salvo en ¿la ingenuidad? de no prever que en la sátira va implícita la provocación. Tan gratuita como la quema del Corán por parte del estúpido fanático evangelista en EE UU. Claro, que los nazarenos luego no van a ir a decapitar a Cayo Lara ni a Almudena Grandes. (DLG)

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La semana por delante DANZA

Un gran clásico

ROGER SALAS 24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/madrid/gran/clasico/elpepuespmad/20110424elpmad_17/Tes

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Coincidiendo con el Día Internacional de la Danza, pero sin que se pueda asimilar como una celebración específica de significado reivindicativo, los Teatros del Canal presentan de nuevo en Madrid el Real Ballet de Suecia (del 29 de abril al 1 de mayo, a las 20.00), una de las compañías más antiguas de Europa y un verdadero poso importante de la historia del ballet europeo desde el XVIII.

La compañía nórdica, ahora bajo la dirección de Madeleine Onne, con una tradición muy específica dentro del ballet dramático y moderno (desde Mijail Fokin a Antony Tudor, o de Ivo Kramer a Birgit Cullberg) ha dado un giro radical a su repertorio activo, centrándose en los modos más contemporáneos. Dos obras de creación componen el programa: Tableau perdu, de Christian Spuck, talento de 41 años que despunta en varias compañías y que usa la sinfonía italiana de Mendelssohn. Lo que más promete es Rättika, del sueco Mats Ek sobre el concierto para violín Opus 77 de Brahms. Ek ha tenido como asistente coreográfica a la importante intérprete Ana Laguna.

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La semana por delante ARTE

Ficciones africanas

FIETTA JARQUE 24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/madrid/Ficciones/africanas/elpepuespmad/20110424elpmad_16/Tes

Personajes vestidos con elegantes trajes de estilo victoriano o de la época de la Revolución Francesa, realizados íntegramente con telas de estampado típicamente africano. Una versión distinta y ficticia de la historia, como si los africanos -por entonces colonizados y esclavizados- hubiesen participado en la pompa y los lujos de la clase dominante de aquellas épocas.

Las metáforas que usa el artista británico de origen nigeriano Yinka Shonibare (Londres, 1962) son vistosas, irónicas, directas, eficaces. Estos estampados se han convertido casi en su marca de fábrica. Los utiliza como símbolo de un continente que ha permanecido mudo e invisible en los grandes acontecimientos del pasado. Aunque el artista explica, para colmo de paradojas, que esos estampados que los africanos actuales consideran como propios son originalmente indonesios.

Esculturas, pinturas y un vídeo fastuoso. La exposición de Shonibare en la sala de la Comunidad de Madrid, Alcalá 31 (hasta el 5 de junio), es una magnífica oportunidad para ver una amplia selección del trabajo de este artista, uno de los más valorados en el panorama del arte británico actual.

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Yinka Shonibare, Scramble-for-Africa

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TRIBUNA: MÓNICA ZGUSTOVA

Libros en el 'gulag'

MÓNICA ZGUSTOVA

24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/opinion/Libros/gulag/elpepuopi/20110424elpepiopi_5/Tes

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Hace dos semanas, en Moscú, visité a varias mujeres que habían pasado su juventud en el gulag estalinista. Para llegar a sus apartamentos en los enormes bloques de pisos de paneles prefabricados llamados jrushchovki, era preciso coger el metro y luego el tren o el trolebús. Allí, en la periferia de la capital, las expresas políticas me recibieron con la proverbial hospitalidad rusa. Nunca rehabilitadas del todo, recordaron los años de su cautiverio no sólo con horror. Varias de ellas me confesaron que sin esa experiencia su vida hubiera resultado incompleta.

La amistad y la literatura fueron los refugios de las mujeres rusas desterradas

Me costó entenderlo. Primero pensé que defendían su juventud en el gulag porque no tuvieron otra. Pero a medida que la conversación avanzaba y me mostraban sus fotos y sus libros (todas ellas erigieron en sus humildes pisos unas bibliotecas admirables), lo fui comprendiendo. Lo excepcional que esas mujeres encontraron en el gulag fue la amistad: una amistad invulnerable, abnegada, firme.

Gaira Artiómovna Vesiólaia me enseñó pequeñas libretas hechas a mano: la poesía que se escribía en el gulag. "Puesto que los libros estaban prohibidos, por las noches recitábamos de memoria esos poemas que habían compuesto algunas de nosotras; preferíamos dormir menos y humanizarnos, elevarnos con la poesía," me explicó Gaira. Entonces recordé mi reciente encuentro con Irina Emeliánova, la hija de Olga Ivínskaia que fue el último amor de Borís Pasternak y en quien éste se inspiró para crear el inmortal personaje de Lara, la heroína de Doctor Zhivago. Irina me contó que, tras la muerte de Pasternak, tanto su madre como ella habían ido a parar al gulag. Allí Irina se enamoró de un preso, traductor de poesía. Los dos enamorados se comunicaban ocultando poemas entre los ladrillos del muro que separaba el campo de las mujeres del de los hombres. Él le dejaba poesías francesas, ella poemas de Pasternak en minúsculos trozos de papel.

Valentina Grigórievna Íevleva, actriz que había pasado ocho años en el gulag de Kotlas, un desierto helado, por haber sido la hija de un "enemigo del pueblo" (a su padre lo fusilaron en los años treinta), compartió conmigo un recuerdo. Una vez, tras una brutal paliza que le infligieron los guardianes del campo, tuvieron que intervenirla en una mano. En la barraca de la enfermería por milagro encontró un libro: Guerra y paz. Era el primer libro que tocaba en muchos años. Mientras se recuperaba de la operación lo leyó a escondidas, y tan pronto lo acababa, volvía a empezarlo con avidez. Así, a falta de otros libros, leyó la novela de Tolstói cuatro veces. Al salir del gulag, la habitación que alquilaba, se llenó de libros hasta el techo: "Me pasaba los días y las noches leyendo. Era insaciable," confesó Valentina, hoy minusválida. "Puesto que después del gulag no pude rehacer mi vida -la gente desconfiaba de una antigua presa-, los libros dieron sentido a mi existencia."

Galina Stepánovna Safónova es más joven que las demás porque nació en un gulag siberiano, en los años 40. Puesto que la barraca, que de niña compartía con su madre y otras presas, era lo único que conocía de pequeña, lo vivía como algo natural. Y hasta hoy conserva los libros que las presas confeccionaron para ella. Tomé uno al azar, Caperucita roja: papeles de distinto tamaño, cosidos juntos a mano; en cada página dibujos hechos con lápices de colores: Caperucita con su cesto de regalos; el lobo con la abuela; Caperucita con el lobo disfrazado... y el texto del cuento inscrito con pluma. "¡Qué feliz me hizo cada uno de esos libros!" exclamó Galina: "De niña esos fueron mis únicos puntos de referencia culturales. Mire, los he guardado toda la vida, ¡es mi tesoro!".

Elena Vladímirovna Márkova, que había pasado más de 10 años en un régimen especialmente duro en las minas de Vorkutá, en la taiga más allá del círculo polar, me enseñó un libro de Pushkin, adornado con antiguos grabados, impreso en 1905. "En el campo, este libro de procedencia desconocida, pasó por centenares, tal vez miles de manos. Los libros tienen sus vidas, sus historias y destinos, igual que los hombres." Elena me mostró también un archivo de cartas que le habían mandado a escondidas, de una barraca a otra, algunos presos: filósofos y escritores. Con sumo cuidado toqué esos pedacitos de papel, llenos de una letra minúscula medio borrada, y constaté que hablan de Kierkegaard, Goethe, Beethoven, Gogol. Al salir del campo, a los 37 años Elena se puso a estudiar en la universidad para luego convertirse en una destacada especialista mundial en cibernética. Abandonó su carrera al cumplir los 80, hace siete años. "Todo eso gracias a los escasos libros que pude tocar en el gulag," concluye, y exclama: "Nadie se puede imaginar lo que para los presos significaba un libro: ¡era la salvación! ¡Era la belleza, la libertad y la civilización en medio de la barbarie!"

Monika Zgustova es escritora.

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NOTA DEL BLOGGER: MAGNÍFICO texto de Monika Zgustova. UN VERDADERO REGALO PARA LA MAÑANA DEL DOMINGO, aun cuando el tema es terrible y desolador. Ella, y ellas –sus tristes protagonistas—, lo convierten en algo sumamente humano.

Soy profundamente rusófilo. Una vez oí o leí a no sé qué estúpido colgante de la UNEAC (Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba), cuyos miembros y miembras, aun uniéndose al ghetto, siguen ostentando en sus currícula la membresía y los premios recibidos (como si todos, o la mayoría de ellos, no estuvieran contagiados de favoritismo y trueque oficial-oficioso) como emulando con los altos militares exsoviéticos engalanados con la chatarrería de sus medallas… bueno, a uno de ellos, creo que era Miguel Barnet, oí diciendo que de la era soviética no había quedado nada en Cuba. O sea, que pasaron por la vida sin saber que pasaban, como el poema del ridículo Buesa, o el no tan mucho mejor Neruda. No sé dónde vivía ese señor, la verdad. Hace tiempo en un poema dije que quien pone su bota, pone también su pie. Quizás es un recurso del pisoteado apreciar más el pie que la bota. Quizás quien dijo eso, vivía siempre con las botas puestas.

En fin, me encantaría ser amigo de Monika Zgustova.

(DLG)

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LA IMAGEN

¿Se acostumbra uno a todo?

JUAN JOSÉ MILLÁS 24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/portada/acostumbra/todo/elpepusoceps/20110424elpepspor_3/Tes

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NOTA DEL BLOGGER: Sí, corazón, incluso al comunismo. (DLG)

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JAVIER MARÍAS LA ZONA FANTASMA

Inmovilizados de pavor

JAVIER MARÍAS 24/04/2011

http://www.elpais.com/articulo/portada/Inmovilizados/pavor/elpepusoceps/20110424elpepspor_20/Tes

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El método más eficaz para cargarse una palabra es su usurpación y su consiguiente ensuciamiento por parte de los usurpadores. A ello han recurrido todas las dictaduras que en el mundo han sido. ¿Cómo creen que quedó el adjetivo "democrático" en el territorio que durante décadas se llamó "República Democrática Alemana" y que no fue sino un Estado totalitario dominado por su ubicua policía secreta, la Stasi? Pero no hace falta una dictadura para llevar a cabo la contaminación. Así lo hemos visto en nuestro país, donde el noble vocablo "liberal" (que, más allá de su acepción económica, no tan noble, significó "Tolerante o respetuoso con las ideas o actitudes de los demás", así como "Partidario del liberalismo", el cual a su vez fue definido como "Doctrina política surgida en el siglo XIX, que aspira a garantizar las libertades individuales de la sociedad"), al habérselo apropiado la derecha más recalcitrante, ha quedado por los suelos. Hasta el punto de que el resultado ha sido aún más grave que el mancillamiento de la palabra (muy malparada sale, en efecto, si se la aplica a sí misma Esperanza Aguirre): se ha acabado con la propia noción o concepto de "liberal", de tal modo que ya casi nadie, ni de izquierdas ni de derechas, está dispuesto a serlo. Y esto, curiosamente, ocurre no sólo en España, sino en todas partes.

Ya casi nadie, ni de izquierdas ni de derechas, está dispuesto a ser 'liberal'.

Ser liberal, en su sentido social y en el uso más coloquial del término, equivalía, entre otras cosas, a no inmiscuirse en la vida y en las costumbres de los demás; a diferenciar entre las capacidades, la competencia y el talento de alguien y su moral, sus vicios particulares, sus ideas y sus creencias. Entre sus obras y su comportamiento en la esfera privada. Esa separación llegó a ser aceptada por la mayoría. Sólo los muy dogmáticos o los muy fanáticos eran incapaces de hacer la distinción. Alguna vez he contado que mi abuela Lola era tan católica que se negaba a ver las películas de Chaplin o Charlot, "porque se ha divorciado muchas veces". Ella se lo perdía, indudablemente, ya que era mujer dulce, afable y de risa fácil, nada iracunda pese a su puritanismo. También recuerdo cómo, durante el franquismo, numerosos falangistas y "leales al régimen" se empeñaban en decir que Picasso era muy mal pintor y que sus "garabatos" estaban al alcance de cualquier niño, sólo porque no podían tragar al individuo con sus ideas "comunistas". Pues bien, este tipo de intolerancia desmedida ha regresado y se le inflige a cualquiera. No ya a los políticos, cuyas andanzas sexuales empezaron a tenerse en cuenta en los países anglosajones y ahora ya son motivo para apartarlos de sus cargos en casi todo lugar, independientemente de lo bien que los desempeñen, sino a los intelectuales, actores, modistos, bailarines y cantantes.

Ya se ha comentado mucho la negativa del Estado francés a rendir homenaje literario al novelista Céline por sus posturas antisemitas, que son muy condenables pero que no influyen en la calidad de sus escritos. Ahora leo que una serie de televisión titulada Glee y protagonizada por Gwyneth Paltrow se plantea suprimir, ante las protestas, una secuencia porque en ella uno de los personajes iba a interpretar una canción -¡de 1973!- compuesta por Gary Glitter, antigua estrella del pop británico que -con mucha posterioridad, en 1999- fue condenado por posesión de pornografía infantil; luego, en 2002, deportado de Camboya a Vietnam bajo sospecha de actividades pedófilas, y, tras cumplir condena en este último país, devuelto al Reino Unido, donde está inscrito en el registro de delincuentes sexuales y tiene prohibido volar en compañías aéreas (?), como si en el transcurso de un trayecto, rodeado de pasajeros, fuera a poder practicar sus depravaciones. A mí me parece bien que contra el señor Glitter se tomen todas las medidas posibles para que no reincida, pero no entiendo que una canción de 1973, por el mero hecho de haberla compuesto él, tenga que ser castigada y nunca más escuchada, sobre todo si la canción es buena. No sé, es como si las editoriales del mundo decidieran no volver a reeditar la maravillosa novela Bajo el volcán, de Malcolm Lowry, porque es sabido que éste, alcoholizado, intentó estrangular un par de veces a su mujer, sin mucho ahínco, todo sea dicho. Aun así, las sanciones contra el ciudadano Lowry me habrían parecido justas y necesarias; las adoptadas contra su obra, semejantes a la represalia de mi abuela contra Chaplin por sus muchos divorcios.

Veo también que en Rusia el director de bailarines de la compañía Bolshoi, Guennadi Yanin, ha perdido el puesto y toda posibilidad de convertirse en director artístico porque "un emisor anónimo" envió a millares de emails y webs de todo el planeta "imágenes de un hombre muy parecido a Yanin en posturas sexualmente atrevidas". El diario Kommersant observó que el hombre había sido víctima de una técnica utilizada por grupos cercanos al Kremlin para desprestigiar a opositores y críticos: "Poco importa que las imágenes sean auténticas. El daño ya está hecho y el objetivo cumplido". En un mundo mínimamente liberal, esas imágenes, aunque hubieran sido auténticas, no deberían haber tenido la menor consecuencia para el señor Yanin, si hacía bien su trabajo. Nos estamos deslizando hacia unas sociedades tan fanáticas, puritanas y represoras como la que albergó la época de mayor esplendor de nuestra malfamada Inquisición. Sólo que lo que hoy se denuncia y condena es tan variado que pronto nos quedaremos todos inmovilizados de pavor.

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NOTA DEL BLOGGER: MAGNÍFICO también. Lo que yo llamo “la perversión de las palabras”. Produce satisfacción cuando uno encuentra pensamientos afines expresados en ese mismo momento por personas que tienen acceso a expresarse públicamente y que son escuchados o refutados –no da lo mismo pero es igual— pero para los que al menos el tiempo no pasa entre el sonido atenuado de los blogs. (DLG)

lunes, 14 de febrero de 2011

UMBERTO COBO - El Negro Abad

(Cortesía de Harold Alvarado Tenorio)

HAF entrega a MVLL uno de los borradores de El celta del sueño durante el Festival Gay de Cartagena de Indias.

El Negro Abad

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El 28 de Diciembre del año pasado,  un despacho firmado por Javier Faya de la Agencia Efe informaba que la Academia Sueca investiga a Mario Vargas Llosa por un posible dolo en la obtención del premio Nobel a raíz de una serie de denuncias, según las cuales, el peruano habría contratado negros o Ghost Writers para sus trabajos literarios. Según el comunicado, el presidente del comité electivo de la Fundación Nobel, Erikson Larsson, habría comentado: «Es prematuro hacer valoraciones sobre este asunto. Solo puedo decir que tenemos pruebas sólidas de que puede haber fraude».

Todo indica que la brigada de delitos informáticos de la policía sueca,  luego de interceptar un correo que MVLL habría enviado a uno de sus operarios clandestinos sobre un cuento donde un pastor anarquista se enamora de una rica heredera, estaría tras la pista de 18 escritores negros que trabajan para el novelista peruano enviándole bocetos y textos casi cocinados que luego se publicarían con  su firma, engordando sus bargueños, el capital de Alfaguara, la editorial del desquebrajado Grupo Prisa, dueño de El País, donde publica en exclusivo el galardonado, y las faltriqueras de la señora Carmen Balcells, la 007 de la literatura latinoamericana, la obesa que más dinero ha hecho en la historia de la humanidad a partir de la escritura de otros.

La fiscalía sueca cree que entre los Negros de MVLL  figuran cinco españoles, dos bolivianos, tres chilenos, cuatro peruanos, dos alemanes, un gibraltareño y un colombiano. Entre los españoles estaría un ex cuñado de Ana Rosa Quintana quien habría fabricado Sabor a hiel, con ventas mayores a los 100.000 ejemplares y la hermosa mexicana Genoveva Casanova, la ex de Cayetano Martínez de Irujo, hijo mayor de la Duquesa de Alba y actual novia de Gonzalo Vargas Llosa, a quien se adjudica la redacción final de El sueño del celta. Previniendo que resulten ciertas las sospechas de la policía sueca, el nuevo nobel ha contratado los servicios de la firma de abogados del difunto José María Stampa Braun, de Madrid, y el bufete de un amigo de Abad de apellido Bejarano, para que le defienda.

Ahora, Rosa Villacastín, la afamada periodista española del corazón, nieta ella misma de Rubén Darío, y quien trabajara por muchos años en la Real Academia Española ha revelado otros secretos de la producción de El sueño del  celta.

Según Villacastín, a mediados de Enero del año pasado, durante una visita que hiciera a la  RAE oyó acerbos comentarios de un grupo de académicos en torno a un aplauso que MVLL acababa de hacer en El País al libro de autoayuda El olvido que seremos, de un ignorado agente inmobiliario colombiano a quien calificaban de Negro, porque según decían, el antioqueño, en su afán de absorber mercados y prestigio, se había encargado de redactar las memorias del martirio de Ingrid Betancur.

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Pero las mayores descalificaciones de los académicos, entre cuyos suspicaces  figuraban  Gimferrer, Anson, Pombo, Pérez Reverte y Marías, eran causadas después de que en una reunión, en setiembre de 2009, en casa de la oronda Almudena Grandes, en presencia de Piedad Bonet, Chus Visor y Juan Cruz, luego que Abad Faciolince contara a MVLL como había descubierto, en un lote que había caído a su librería de Medellín como pago de una vieja deuda de unos finqueros arruinados por su madre, tres libros [The Black and The White, The Amazon Journal of Roger Casement y Some Poems] de un homosexual irlandés que había sido ahorcado por traidor, pero que, según la Bonnet, había sido amante de un jovencísimo Ignacio Torres Giraldo, uno de los fundadores del Partido Comunista Colombiano, en Cajamarca, con una vida plena de aventuras e intrigas ideológicas. MVLL en secreto y en  el baño del piso del poeta de la experiencia García Montero, le encomendó al Negro Abad el envío de los libros, hacer un resumen de sus lecturas y redactar un Draft, así lo dijo en inglés macarrónico, de una futura novela.

Ahora resulta, según los análisis y lecturas de más de media docena de críticos independientes de las editoriales, o enemigos de Prisa, empresa que acaba de cesar más de 2000 trabajadores porque temen una quiebra inmediata, que El sueño del celta no fue redactado por MVLL porque incurre en tantas incongruencias y dislates como suele acontecer en los libros de Héctor Abad Faciolince.

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Según Javier Munguía, por ejemplo, a pesar de que como en otras novelas de MVLL o en sus memorias, El sueño del celta presente dos planos narrativos, uno mientras espera su ejecución y otro remontando la infancia de Roger Casement hasta sus últimos años, en vez de ocuparse en detalle de la vida del héroe Abad Faciolince prefiere pormenorizar los indignantes casos donde los aborígenes africanos y americanos son explotados, humillados y asesinados, con el agravante de que Casement nunca fue testigo de esos hechos y todo es contado de oídas, como en El olvido que seremos, cuando Carlos Castaño terminó por confesar al huérfano ilustre cómo hizo asesinar a su padre y cómo el sicario, al sacarle el dinero que llevaba el difunto en el bolsillo de la camisa,  le introdujo el poema apócrifo de Borges con que tanto ruido ha hecho. “La impresión general que queda luego de leer esta novela, dice Munguía, es que la rica materia prima que la inspiró fue poco aprovechada por el autor. No vemos al personaje fascinante que sugiere la biografía de Casement. No vemos sus contradicciones, sus claroscuros, sus luchas internas más complicadas. Vemos, más bien, a un ser de una sola pieza, digno de admirarse pero poco interesante Toco madera para que El sueño del celta no sea el canto de cisne de Vargas Llosa. ”

Por su parte, Juan David Correa, de la prestigiosa revista Arcadia, afirma que “El sueño del celta termina en nada porque el personaje no aparece por parte alguna”. “El tema de la sexualidad, agrega, se pierde en un par de miradas que Casement tiene con amantes furtivos, los viajes los recorren las palabras, los personajes secundarios son de papel maché…”

Una diva mexicana y un diletante colombiano hijo de papi han diluido el prestigio de un premio nobel buscando ese cuarto de hora de la gloria que nunca habrán conocido. Casanova y Abad son dos Negros del mismo palo.

Umberto Cobo

viernes, 4 de febrero de 2011

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Otro Ira Flavia!!!!!!!!!!!!!!!!!!

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El Rey de España concede marquesados a Mario Vargas Llosa y a ese señor que es entrenador de la Selección Nacional de Fútbol y de cuyo nombre no me acuerdo porque o futebol me importa un comino.  ¡Qué ANTIGUAS son todas!

DLG

lunes, 13 de diciembre de 2010

Dame la mano y danzaremos…

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dame la mano y me amarás.

Como una sola flor seremos,

como una flor y nada más.

Te llamas Juana, yo Esperanza,

pero tú no me olvidarás,

porque seremos en la danza

como una flor, y nada más.

 

http://eltinajn.blogspot.com/2010/12/me-lo-envia-un-amigo-desde-estocolmo.html

 

Los peruanos en Esto(-Es-El-)Kolmo siguen esperando por la revolución…

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miércoles, 8 de diciembre de 2010

MARIO VARGAS LLOSA–Discurso en Estocolmo

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http://www.elpais.com/elpaismedia/ultimahora/media/201012/07/cultura/20101207elpepucul_1_Pes_PDF.pdf

 

Un discurso limpio, cercano, accesible.  La pompa está en la sencillez con que aborda el recibimiento de este premio Nobel, dejando el smoking reposando en el espaldar de una silla mientras nos deja saber  --nos narra oralmente  --el significado de las cosas importantes para él.  Un discurso también valiente al reducir el frío de Estocolmo con con su cálida oratoria, abarcando aspectos que se escapan a lo puramente intelectual, condenando lo condenable con claridad y sin ambages.  Un discurso, en fin, que humaniza los magnos salones académicos.

DLG

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viernes, 8 de octubre de 2010

LEYENDO EN WOOSTER (viernes, 8 de octubre de 2010)

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Ni me senté en mesa, a la barra me fui.  Los periódicos de hoy son como monográficos en torno al nóbel Mario Vargas Llosa.  Posiblemente no haya nadie que desarrolle más el chovinismo que las sociedades hispanas (a ambos lados del Atlántico); supongo que nos viene por ese lado y que de ello no se puede culpar a los negros (de África) ni, mucho menos, poner la blame on Mame (boys!) como hacía que cantaba Margarita Cansino.  El LEYENDO EN WOOSTER de hoy podría también llamarse “Everybody love Mario, now.”  De hecho, el único comentario en contra (que no me atreví a leer para no contrariarme) era el del cineasta Oliver Stone, que decía algo así como que a quién le interesa lo que ese hombre escribe.  Pues, querido Oliverio Piedra, por lo menos por lo menos, a medio mundo.  Él seguramente debe estar muy encerrado en su concepto americano de izquierda como para entender a Mario Vargas Llosa  --y eso que es facilito, y hasta previsible--, o a algo que vaya más allá de Fidel Castro o del venezolano Chávez (Oliver Stone - “La histeria anti-Chávez es española” --http://www.elpais.com/articulo/cine/histeria/antiChavez/espanola/elpepuculcin/20101008elpepicin_3/Tes).  “La histeria anti-Chávez es española”, y por qué la tiene que coger ahora con nosotros…  Afirmar algo así contradice toda la realidad.  ¿Vive en España ese señor?  ¿De qué histeria está hablando?  Posiblemente él nunca sabrá distinguir, independientemente de los matices y abismos políticos, la enorme diferencia entre la gresca a la española y la chusmería latina, y creerá que todo ello forma parte de un paisaje “pintoresco” y fascinante.

¡Qué pena, Señor!

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ALENA COLLAR - Acerca de Vargas Llosa y su obra. Intento de Acercamiento

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ALENA COLLAR

Acerca de Vargas Llosa y su obra . Intento de Acercamiento

Posted on Octubre 7, 2010 by alenar

http://alenacollar.wordpress.com/2010/10/07/acerca-de-vargas-llosa-y-su-obra-intento-de-acercamiento/

 

¿Cuándo se jodió el Perú, Zavalita?… es la primera frase si no recuerdo mal porque cito de memoria, de Conversación en La Catedral.

Efectivamente, de esta manera tan desconcertante- porque entra “in media res” en la narratividad, empieza una de las mejores obras en lengua castellana que se han escrito el siglo pasado.

Y en una época en la que incluso el verbo “joder” en literatura era casi una blasfemia.

Vargas Llosa de heterodoxias sabe mucho, y de países jodidos también. En esta obra bajo el aspecto de una novela coral no cuenta cuándo se jodió el Perú, sino cuándo las ideologías y el afán de Poder joden a los ciudadanos normales de un país cualquiera. Y eso, por aquél entonces también era aplicable en España.

El ejemplo me sirve para destacar una de las principales características de su narrativa: que es generalizable. Es decir, que trasciende el ámbito peruano, y el hispanoamericano- cosa de la que no todos los escritores pueden presumir- para llegar a cualquier sociedad. A través del mundo peruano leemos a Guatemala, a Chile y su golpe de Estado inducido por la CIA, a España y sus caciques de pueblo, a Argentina y sus muertos-desaparecidos, y a una sociedad civil que vive alrededor de una “catedral” metafórica de silencio y resignación mientras ejerce su único derecho: conversar.

Y a veces ni eso. Porque ya desde niños  (Los Cachorros) nos enseñan que vence el fuerte, no el razonante, a través de las más bien desventuras de una pandilla de adolescentes, que establecen las mismas relaciones que sus mayores, basadas en el imperio de la dominación por la fuerza bruta y la manipulación tanto física, como moral.

La segunda característica de su obra podría ser entonces enunciada como : la demolición narrativa del engaño de los sistemas de poder. La denuncia de sus métodos.

Pero Vargas Llosa además de estas dos obras, que a mí me parecen fundamentales aunque sean antiguas porque inauguran un estilo, ha sido y sigue siendo un desvelador de sueños. Y esto ocurre en una obra muy extraña, muy poco leída, muy poco criticada y muy poco comentada porque además es muy surrealista, es decir, muy no “realismo mágico” sino “surrealismo mágico”, como es La Señorita de Tacna.

Los críticos la definen como una obra menor; habrá que pensar que los críticos no entendieron ni papa –sin perdón- de los sueños encubiertos bajo un delirante lenguaje, de esta señorita presuntamente absurda en un mundo presuntamente real. Aquí el estilo de Llosa se bifurca hacia un lirismo de metáfora casi salvaje, de paroxismo asociativo, de demostración de que la palabra puede crear tanto como un mundo aparte, y de que, desafortunadamente, todo ello topa de frente con el muro de la gente muy civilizada, requetecivilizada, recontracivilizada.

La tercera característica sería pues, la capacidad de recreación lingüística de mundos imposibles.

Y naturalmente tenemos la faceta más controvertida de Vargas Llosa, que se desvela en ensayos y artículos periodísticos.

Las opiniones políticas o las ideologías personales de los escritores parecen estar sometidas a las críticas de los críticos, que, según corre el aire de la historia, así juzgan, olvidando por supuesto la literatura y dejando que las marcas de la opinión dominante se peguen al escritor porque “ es lo políticamente correcto”. De manera que a Galdós nunca le dieron el Nóbel porque los muy progres escritores de izquierdas de su tiempo pusieron el grito en el cielo, acusándolo poco menos que de servidor de la clase media y vendido al capital; eso sí, no se molestaron en leer Nazarín.

Y a Vargas Llosa se le acusó en su primera época de comunista tremebundo y en sus últimos años de fascista. Vaya por diox, o por Marx… Naturalmente se olvidaron de que a Dios lo mató la generación de Sartre y a Marx, el pobre, ya no le leen ni los marxistas, entre otras cosas porque es aburridísimo. Quiero decir con esto, que, basta que Vargas Llosa escriba que Cuba es una dictadura para que se alcen los bujujús correspondientes, olvidando que en su día apoyó- como casi todos- aquella Revolución.

Y por supuesto no leyendo- vaya a ser que se enteren de algo- libros como Lituma en Los Andes, que vienen a ser un ensayo novelado de los movimientos guerrilleros de la época y del terrorismo de Estado existente. Ni tampoco leerán – por si se les pegara algo de inteligencia- los ensayos sobre escritores, La Orgía Perpetua (sobre Flaubert), o el último, sobre Victor Hugo, La Tentación de lo Imposible, o sus ensayos, Contra Viento y Marea.  En los que despliega un espíritu libre para analizar, sin importarle un ardite lo que los sacrosantos críticos decidan sobre el nuevo cliché en el que meterle.

Porque Vargas Llosa no tiene clichés. Es decir, es inclasificable. Dirá lo que le parezca que deba decir, guste o no. Expondrá juicios razonados, lo hará con un estilo que se distingue porque cualquiera puede entender lo que dice- otra característica de su escritura, la naturalidad- y finalmente nos dejará el solo testimonio de sus palabras para juzgarle.

Molesta que apoye a EEUU – visión maniquea naturalmente, como la de que García Márquez apoyaba a Cuba-, o que diga que los nacionalismos son un obstáculo para la democracia. Y entonces le agitan fanáticamente las banderas nacionalistas en la cara, demostrando que lleva razón.  Y naturalmente, no le leen, demostrando que son mucho más antidemócratas que él.

No importa. Quienes le farfullan soflamas nunca escribirán La Guerra del Fin del Mundo; están muy ocupados en prepararla.

© Alena Collar

(Se publica este artículo por cortesía de su autora)

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jueves, 7 de octubre de 2010

Nobel de Literatura de 2010 para Mario Vargas Llosa (“looks like” he “made it”…)

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Pues sí, looks like he made it, parece que aquel joven periodista/personaje de La Tía Julia y El Escribidor logró lo que se proponía en aquella novela: ser escritor reconocido y de fama mundial y llegar a Europa.  No recuerdo si entre aquellas intenciones suyas estaba el Nobel, pero, en fin, lo consiguió.  Y nadie se lo regaló, eso es un hecho.

Creo estar seguro de que en Camagüey yo era orgulloso propietario de un ejemplar de esa divertida y positiva noveleta (o siempre lo fue la Pucha, no recuerdo) porque fue un arma que utilicé de antídoto contra los efectos primarios y secundarios del comunismo in-situ.  La leí muchas veces.  También To Kill A Mockingbird, de Harper Lee, que nunca me defraudó ni dejó de darme una paz especial.

A MVLl ya ni le leo, a no ser algún que otro artículo periodístico.  Hace muchos años, yo leía Conversación En La Catedral acostado en la cama de mis padres en la primera habitación (creo que la mía se había quedado sin luz) y al descubrir el bien guardado secreto-clave de todo el por qué de La Catedral, literalmente di un salto involuntario sobre el colchón y grité no sé qué  cosa.  Mi madre, y creo que Emilia Espinosa o Yeyo, que estaban en la saleta paliqueando, vinieron corriendo a ver qué me había pasado.  Y yo sólo pude responder: “¡algo genial, algo genial!”  Bueno, pues con la genialidad me dejaron. 

Cuando él y yo –y otras personas— compartimos el homenaje póstumo al poeta Gastón Baquero en Casa de América, le entregué al pasar mis dos libros editados por Betania y algunos Timbalitos.  Él ni me miró siquiera.  Una lástima pues.  Siempre pensé, en aquel lejano Camagüey, que a él le hubiera gustado saber de la reacción de un lector suyo ante el secreto de La Catedral y de que uno de sus libros me sirvió como refugio contra el desastre atómico anímico que produce el comunismo.

DLG

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domingo, 25 de julio de 2010

LEYENDO EN WOOSTER (domingo, 25 de julio de 2010)

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coffee and guy

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Mañana es 26. 26 de Julio.

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Mario Vargas Llosa - Héroes de nuestro tiempo

http://www.elpais.com/articulo/opinion/Heroes/tiempo/elpepuopi/20100725elpepiopi_12/Tes

Ya sé que este señor sigue siendo una de esas firmas sacrosantas que va a misa y procesión, pero a mí me gustaba más cuando simplemente era el Varguitas de La Catedral y de aquel periodicucho de Lima donde trabajaba también Pedro (se me olvidó el apellido), el escribidor. Entonces pensaba que él correspondía a lo que escribía, y después me parece que se ha profesionalizado demasiado y nunca es bien pagado lo creído que se lo tiene.

Con Cuba suele acertar bastante, después de haber cantado sus alabanzas. Suscribo todo cuanto dice en La Cuarta Página, salvo ese desmelcoche obsesivo que tiene el latino por llamar a cualquier persona héroe o patriota, o lo contrario. Yo no sé cuál es el pasado mediato de todos nuestros “héroes” pero el hecho de que muchos de ellos hayan sido “mayimbes” (y sus intelectuales, honrosos y orgullosos miembros de la organización estatal que los agrupa y controla su comportamiento) no significa para mí nada positivo. Entiendo perfectamente que no puede ser de otra manera pues ya son varias las generaciones que abarca la “romántica” Revolución de los palotes, y nadie suele nacer outer-space.

Bueno, creo que ahora parecen más calmados después del bombardeo sistemático de manipulaciones que han tenido, pero, a pesar de todo lo mal que lo ha hecho el Gobierno español y sus evidentes intereses nada heroicos sino meramente colonialistas (tanto como el imperialismo norteamericano que les sustituyó y tanto odian visceral y patológicamente), espero que no se les ocurra poner demandas de indemnización como Ingrid Betancourt y como este ex preso de Guantanamo U.S. Base, acogido por el Estado español (hay otro que se niega a aprender español, no sé si transigirá por las lenguas comunitarias), y que recoge José María Irujo –excelente periodista-- en este artículo:

José María Irujo - Guantánamo, gratis

http://www.elpais.com/articulo/espana/Guantanamo/gratis/elpepunac/20100725elpepinac_8/Tes

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Y mañana es 26.

Eso no significa nada para la mayoría, pero para los nacidos en aquellas islas salvajes que descubrió Colón, simboliza LA SEMILLA DEL DIABLO.

Podría cantaros varios himnos (revolucionarios, claro está). No se me han olvidado, no he podido olvidarlos --y eso que ni siquiera fui pionero…-- Algo así como “Historia de la Revolución”: La sangre que en Cuba se derramó, nosotros no la podemos olvidar, por eso unidos debemos estar, recordando aquellos que muertos están… Y en ese momento, Nikitina Joplin daba una palmada y gritaba “¡Pista, muchachitas!” y todos empezábamos a menear las caderas como cabareteras en perfecta alineación.

Pero no, NO, no os asustéis, que “6 x 6 es 36 y en Santiago es el 26”… Mañana 26 –dice el periódico-- es el cumpleaños de un montón de gente linda que me merecen mucho más respeto y admiración que esa basura a cuya celebración por miedo y conveniencia acudirá un millón de personas, lo que el ingenuo mundo exterior (ellos sí que están el outer-space) considerará como “asistencia masiva, o apoteósica”, sin querer darse cuenta de que todo es falso, falso, falso como el amor de los hombres según la copla, y siempre ha sido mentira, mentirita, y postalita (que en esto ZP y acólitos también han sido contagiados, ¿o es innato, propio?). Bueno, el primero, Mick Jagger, uno de los pocos antiguos rockeros todavía vivos (igual que yo, según Google, “uno de los mejores poetas cubanos todavía vivos”). Luego están Helen Mirrell, Sandra Bullock y Kevin Spacey. Blake Edwards. Ana María Matute. Y Fernando Grande-Marlaska. Los demás no es necesario nombrarlos.

Peace and Love, brothers and sisters.

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© 2010 David Lago González

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© Mario Vargas Llosa

© José María Irujo

© El País

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domingo, 21 de marzo de 2010

DAVID LAGO GONZÁLEZ - Mi gozo en un pozo

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“The eye makes the picture,not the camera”

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Disfrutábamos tanto con aquellos libros que los comisarios políticos de la cultura cubana habían decidido que no debíamos leer para preservarnos —oh, pater nostrum— de cualquier desviación que pudieran ocasionarnos, que recuerdo aquella sensación como una de las mayores alegrías que nos estaba destinada (no permitida) en las Islas Desafortunadas. Unas veces venían a través de Fefa la bibliotecaria (pueda ya decir su apodo: hace años que murió), y otras, de diversas formas y manos. Saul Below, Mijail Bulgakov, Mario Vargas Llosa, Guillermo Cabrera Infante... la lista era amplia, y contradictoria. Cada libro se convertía en tema de conversación para una semana o más recordando pasajes, frases, situaciones que se asimilaban a las nuestras.

No recuerdo cómo, o si lo tenía alguna persona muy cercana, pero hubo un tiempo en que se me hacía fácil tener acceso a “La tía Julia y el escribidor”, de Mario Vargas Llosa. Ahora que la tía Julia ha muerto en la vida real, se me han avivado estos recuerdos y otros posteriores. Me he reído a mares con ese libro. Se convirtió en una especie de prozac literario que me levantaba el ánimo cada vez que éste caía (¡con tanta frecuencia!), me infundía fuerzas y anomalías cerebrales como el sueño americano, y, aunque suena ridículo, hasta soñaba alguna vez que alguna otra vez yo llegaría a París, o a cualquier otro sitio medianamente civilizado, y me pasaría lo mismo que a Varguitas: completaría el círculo del creador.

Su obra maestra, “Conversación en La Catedral”, fue devorada por mí con tanta satisfacción como la que puede sentir un vampiro al encontrar un cuello hermoso, o la que puede dar al hombre lobo un cambio climático que prolongue indefinidamente las noches de luna llena. Estaba yo leyendo, acostado en la cama de mis padres (no sé por qué razón), en el momento y lugar en que llego a aquel punto álgido que desvela, con la prontitud y poca importancia de un simple comentario entre los personajes del libro, todo el centro y razón de la trama. Y aquello, tan inesperado, tan insospechable, me hizo levitar sobre la cama con exclamaciones y estertores parecidos a los de una eyaculación gozosa, y empecé a decir en voz alta, muy alta, casi gritando: “¡Genial! ¡Genial! ¡Genial!”, tal es así que mi madre y unas amigas que estaban con ella sentadas en la saleta, vinieron corriendo a ver lo que me pasaba.

Lo único que me pasaba era el incomparable placer de leer, que, en este caso, se acentuaba por lo prohibido.

Pasados los años, el escritor y yo coincidimos en Casa de América, creo que con ocasión del Homenaje a Gastón Baquero, recientemente fallecido por entonces, y en el que ambos participábamos. Pedí a varias personas ser presentado, pero no tuve éxito: al fin y al cabo yo no tenía credenciales de haber pertenecido a la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), organismo representativo de la cultura oficial cubana. De modo que yo, que iba preparado con mi atado de libritos publicados por Editorial Betania y por mí mismo en Ediciones Timbalito, logré salirle al paso mientras atravesaba el pasillo central del anfiteatro y, como un adolescente trémulo, le entregué mi paquetito. Sin mirarme, ni siquiera como a una cucaracha, ni siquiera como el escribidor Pedro Camacho miraba a los argentinos, tomó los libros y como una estatua que ¡oh! sorprendentemente habla, me dijo “Gracias.”

¿En que momento se jodió Varguitas?

© David Lago González

lunes, 8 de marzo de 2010

LEYENDO EN WOOSTER (domingo, 7 de marzo de 2010)

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Sari Maritza sipping tea, publicity still, 1933

(Sari Maritza sipping tea, publicity still, 1930)

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(Hoy por ayer)

Sigue goteando el tema cubano, el sempiterno, aburrido, hiriente y maloliente tema cubano, con el que nadie sabe ya qué hacer. No sé si alguien lo supo alguna vez, pero lo que es ahora —a-ho-ra—, no ya una solución sino cualquier tipo de alivio se convierte en un misterio tan profundo como el huevo y la gallina, o la concepción del mundo según la Biblia, el Big Bang o Darwin. Es difícil mantener la cordura. Mantener la serenidad es algo inconcebible, ya de sobra con nuestro contenido genético del apasionamiento verbal (que supongo vendrá de la sangre española, de la africana serán los machetes). Y mantener la lengua fácil en el cofre de la boca donde no le da el sol es una tarea tan imposible y falta de futuro como el propio futuro de La Isla Desafortunada.

En El País hay de todo. Crónicas, noticias comentadas, artículos que van más allá de las fronteras insulares. Preguntas como unanswered prayers que se formula y lanza el periodista Juan Jesús Aznárez en su columna “Job en Cuba”. Ya nadie informa fríamente sobre la realidad, sino que antes —aun cuando su ocupación específica no sea la de opinar— pasa por el tamiz del enviado especial (o no), que un día está más claro o menos claro, u oscuro del todo. Comentarios que incluyen un más amplio abarque del comportamiento de la política y el conciliábulo extra-insular, a cargo de Vargas Llosa. Lo que sí se desprende de todo este montón de páginas inútiles es algo de indignación y, sobre todo, asco. En un texto anterior dije que la muerte de Zapata lo que había hecho es abrir el bote de la pestilencia y ésta sí que es libre de viajar por todas partes y llegar a todas las narices, aunque se pongan esos ridículos tapabocas de cuando se esperaba que la Gripe A descargara un poco la superpoblación mundial estilo Darwin. O sea, in other words, quien diga que no huele nada, simplemente está mintiendo, y es tan asqueroso como el asco en sí: la muerte de Zapata ha venido a definir concluyentemente la realidad cubana. Eso quizás es un logro, una ironía del tiro por la culata: simplemente el resultado. No es que en 51 años no se hayan sucedido hechos aplastantes suficientes para condenar al comunismo cubano como al resto de las ideologías totalitarias de represión y exterminio o lobotomización, tanto interna o externamente, pero la Seguridad del Estado, la comandancia política del gobierno y su maquinaria de infiltración planificada y sistemática sobre la opinión pública son verdaderamente magistrales, por lo que la Academia Sueca debería crear un nuevo premio Nobel: el del horror o la infamia, y otorgárselo en pleno al Estado cubano, y de paso un accésit al conveniente muro de resonancias que encuentra alrededor del mundo formado por la adolescencia trasnochada de supuestos libertarios que no quieren renunciar a sus sueños juveniles y también por los muchos afectados por los desmanes y las torpes políticas capitalistas y los más diversos caciquismos que han creado y crean sobradamente un caldo de cultivo para creer en cualquier cosa, en lo que sea, aunque sea simplemente en la destrucción por el simple placer de destruir.

Mauricio Vicent tiene razón cuando, como título de su información comentada, repite “¿Zapata? ¿Qué Zapata...?” El preso político Boitel (o “dirigente estudiantil”, según he leído también) murió igualmente de una huelga de hambre en el año 1972. Yo salí de Camagüey 10 años después, y creo que realmente vine a enterarme hace tan sólo unos años de la muerte de esa persona. Recuerdo de cuando mataron a Agapito, un muchacho de “la onda”, porque era de mi ciudad y todo el mundo me decía que yo lo conocía de nuestro punto de reunión, la Plaza del Gallo, pero nunca logré ponerle cara. ¿Qué sabe el ciudadano de a pie en Cuba sobre presos políticos, huelgas de hambre, vestidos blancos o proyectos disidentes? Harto tienen ya con sus problemas cotidianos, con esa elementalidad que ha sido una estrategia delicadamente organizada desde el triunfo de la Revolución, para reducirlos (y reducirnos, en los distintos periodos que hemos vivido allí) a meros estados vegetativos andantes que, como las plantas sembradas al lado de un alto muro, “se van en vicio” en busca del sol, y ese sol está muy lejos, muy alto, y ese sol sólo conjuga en verdad el verbo “huir”, y para muchos eso ha sido y es un reto de valentía.

Me viene ahora a la memoria, haciendo el camino de Freituxe a Bóveda (Lugo, Galicia), en abril de 1982, encontrarme con un señor de una aldea vecina que me preguntó y me echó en cara (ya todos por allí sabían que había regresado el hijo de David Lago después de 70 años de haber marchado el progenitor) qué nos pasaba a los cubanos que no hacíamos nada para quitarnos esa dictadura o tiranía de encima (tampoco es que los españoles hubieran hecho tanto para salir de Franco...) Es un tanto lógico que el respeto vaya a la par de los esfuerzos de lucha de un pueblo, pero durante todo el siglo XX y lo que llevamos de éste se ha respetado también la huída (llámese exilio, destierro o cualquier otro nombre), sobre todo de las poblaciones europeas, pero igualmente se habla con cortés consideración del destino de otros desplazados, sean asiáticos, árabes o africanos. Sin embargo, el cubano es cosa de cobardes. En un poema de mi libro inédito “La mirada de Ulises” vengo a decir que a Cuba (PM, o político-militar, como ETA) no se le puede destruir porque nunca ha existido, es un fantasma, y a los fantasmas no se les puede matar porque ya están muertos: ¿cómo luchar entonces —y además, ser comprendidos— contra cosas que sólo forman parte de lo onírico del ser humano, espectros que no tienen base material?

En la sección La Cuarta Página, Mario Vargas Llosa se pregunta sobre el dualismo de Lula da Silva. En la nueva urbanidad política de salón representa la más válida imagen decente del contrapunto a la vulgaridad, arrogancia y locura imperial (e imperialista) del venezolano Chávez y el coro de los ecos indígenas, pero en realidad es y todos siguen siendo muchachones que una vez admiraron el sueño romántico de La Revolución Cubana y jóvenes entonces que querían ser como el Che. Si hoy se comportan en sociedad es porque saben que deben medrar con “las buenas costumbres” del capitalismo ya que sobre la resurrección y restauración del ideario comunista, con su base teórica y su amor platónico por las clases desfavorecidas, todavía pesa demasiado el efecto dominó del este de Europa y del imperio soviético. Pero como nunca fue tan condenado y enviado a los avernos como sus hermanas fascistas y nazis, sólo es cuestión de esperar, como hace la Iglesia aguantando callada, carretas y carretones, porque al final sabe que la paciencia será premiada.

¿Los valores éticos? ¿Qué es eso? Todo está sumido en la más absoluta confusión, lo que no sé es si es natural o premeditada. Y no sólo es cuestión del Río Grande hacia abajo. Anoche veía en un canal de televisión las imágenes, ya un poco antiguas, de un pleno en un ayuntamiento vasco gobernado entonces por Herri Batasuna donde ETA había cometido un asesinato (o, siguiendo la nueva semántica política, una ejecución). El concejal batasuno lamentaba el hecho y era enérgica y apasionadamente increpado por ciudadanos (pocos) que le exigían que en vez de lamentar, condenara el asesinato. Por supuesto, no hubo condena alguna. Entonces mi memoria rastreó una imagen mucho más reciente en que el presidente de España, José Rodríguez Zapatero, se comporta exactamente igual que aquel concejal de la izquierda abertzale (tan próxima al gobierno cubano): lamenta pero no condena. ¿Cuál es la diferencia?

© 2010 David Lago González