domingo, 29 de mayo de 2011

ME ASUSTAN las asambleas vecinales

O de barrio.  ME ASUSTAN, ME DAN PÁNICO, TERROR.  Me pongo a temblar como un gorrión cuando sopla de pronto el viento de la Sierra en invierno y no ha logrado guarecerse.

Lo peor es que en este caso de la indignación y la “organización” de las asambleas, ni ellas y lo posterior son tan pasajeras como el viento frío serrano ni yo soy un simple gorrión.  Ya a principios de los 60 viví algo de asambleas de barrio, y lo que vino después fue el comunismo, el fascismo y todos los ismos posibles hasta dejarme a mi de por vida en un puro y eterno nerviosismo.

Simplemente, NO VOY A ESPERAR A QUE LA INDIGNACIÓN SE CONVIERTA EN OTRA COSA MUCHO MENOS JUSTIFICABLE y mucho más inhumana, y sumamente indigna.  No sé cuándo va a ser, pero no voy a quedarme mirando la transformación.  No voy a leer “Así se templó el acero” ni siquiera el “Indignaos” ni voy a secarle la baba a Sampedro apoyándolo.  YO HE VIVIDO INDIGNADO DESDE EL AÑO 1953 cuando el ataque al Cuartel Moncada y comenzó a desarrollarse toda la degeneración que ha motivado la degeneración y defenestración de la provincia de ultramar en que nací, Y CADA VEZ ME INDIGNO MÁS.

DAVID LAGO GONZÁLEZ

(Madrid, 29 de mayo de 2011)

1 comentario:

Sofía Serra dijo...

Antes de ayer pasé mucho miedo, pero aquí, en internet, donde parece que uno no peligra, sin embargo lo pasé realmente mal, REALMENTE, tranxiliums incluidos. Porque hice eso, NO ESPERAR a que todo eso se convierta en todo lo que tú dices. me ha traído sopapos en facebook y entre "mis amigos", y muchos silencios, inmensos silencios.
El español es esencialmente cobarde (lo da el terreno). Y borrego. (tú ya sabes que no soy española, ;)

Entiendo a qué sentimiento aludes. Aunque no haya vivido lo que tú has vivido, sé de QUÉ hablas. No sé por qué creo que desde que nací es un sentir hacia el que estoy sumamente sensibilizada.

Aquí en Sevilla no ha habido asambleas, o que yo sepa sólo una, a la que sé que han ido cuatro gatos (me los contaron :)).

No dejaremos que la tiren a la basura. A la democracia.
Un beso